Centro Dinámico
Comprende las dinámicas, humana, espiritual y de la gracia que aplican para cualquier ser humano. Son etapas de desarrollo y realización del ser humano, dinámica humana, capacidades del liderazgo personal trasformador y motivacional de la persona para lograr y obtener mejor desempeño y resultado en cualquier campo de acción. Dinámica espiritual, conducir al ser humano a un camino de silencio y soledad, más exigente porque exigen más compromiso de la persona para lograr muy buen trabajo a nivel interior para que se refleje en buenos actos y obras. Dinámica de la gracia, preservar una persona con Dios para el verdadero obrar de su poder, para las diferentes responsabilidades que tenga que cumplir alguna persona.
Dinámica Humana
La Dinámica Humana comprende el desarrollo de capacidades de liderazgo personal transformador, que implica la formación de hábitos de comunicación basados en la escucha empática, el respeto al otro, la comprensión real y profunda del criterio de los demás, la búsqueda cooperada de nuevos y enriquecedores puntos de vista, que potencien la iniciativa y la creatividad en la solución exitosa de las cuestiones de trabajo y de la vida. Conduce a la formación de un clima psicológico participativo y positivo que estimula la Auto expresión personal y grupal.
Resulta extraordinariamente importante, la idea de que la dinámica humana se expresa en diferentes dimensiones: personal; grupal; organizacional; que son interdependientes. Los roles tienen un papel protagónico en la comprensión de cómo se estructuran y funcionan, en cada persona, los mecanismos subjetivos reguladores internos y como estos interactúan con los externos para producir un comportamiento armónico en cada momento de la vida.
En el interior de cada persona, se configuran y cambian, según las exigencias de las situaciones, los contenidos reguladores para cada rol en las diferentes dimensiones. Es una especie de monitor permanente del comportamiento que, por dinámico, moviliza a todas los procesos y estructuras subjetivas de la persona para responder adecuadamente a las diferentes situaciones que se van presentando.
Dinámica Espiritual
La vida espiritual, aunque responde a una vocación común y comunitaria, exige la respuesta seguir la propia vocación en la Iglesia, con una atención particular a la llamada y al servicio eclesial, a la misión, a las circunstancias concretas de vida y de trabajo. Podrá hablarse entonces de una vida espiritual o de una espiritualidad en la que los elementos comunes están caracterizados por la vivencia de la vocación sacerdotal, religiosa, laical, matrimonial.
Dinámica de la Gracia
Virtud es una disposición habitual del hombre, adquirida por el ejercicio repetido de actuar consciente y libremente en orden a la perfección o al bien. La virtud para que sea virtud tiene que ser habitual, y no un acto esporádico, aislado. Es como una segunda naturaleza a la hora de actuar, pensar, reaccionar, sentir.